Silió es el nombre de mi calle y de la antigúa fábrica de cerámica que se 
encuentra en la plaza donde vivo.
A este edificio y sus alrededores, he dedicado muchas
de mis acuarelas. Es para mí el edificio más representativo que queda en nuestra ciudad del periodo industrial de finales del s. XIX, y principios del s. XX. La construcción de "La Cerámica" se proyectó en 1904 por Coloma y el ingeniero Luis Silió, en los terrenos que iba dejando aprovechables el desvio del ramal sur del Esgueva en torno al barrio de los Vadillos.
de mis acuarelas. Es para mí el edificio más representativo que queda en nuestra ciudad del periodo industrial de finales del s. XIX, y principios del s. XX. La construcción de "La Cerámica" se proyectó en 1904 por Coloma y el ingeniero Luis Silió, en los terrenos que iba dejando aprovechables el desvio del ramal sur del Esgueva en torno al barrio de los Vadillos.
El conjunto edificado tiene, como parte principal, la chimenea y una gran nave rectangular cubierta a dos aguas, adosándose un cuerpo mimético más pequeño a uno de sus costados. El material de construcción es ladrillo prensado cara vista y teja plana para las cubiertas.
Mi barrio
, fue en su dia configurado por esta fábrica, y posteriormente, en los setenta, la expansión del barrio determinó su cierre. Algunos de mis vecinos, a los que también he dedicado algunos de mis apuntes, trabajaron en "La Cerámica"; me cuentan a veces las jornadas de huelga, el humo que desprendía la chimenea, ...
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